
Cuando era chiquita llenaste todo mi mundo con tu presencia, con tus cariños y amor sintiendo que era lo mas importante en tu vida. Fui creciendo y con el mi amor y tu amor. La primera vez que senti morir fue cuando me arrancaron de tu lado y me trajeron a Santiago fue un dolor que me costo años superar, paso el tiempo y el seguir comunicadas fue un balsamo a mi entristecido corazón pero llegaron las ilusiones amores y desamores propios de la edad.
En dos dias mas se cumplira un año que Dios te llamo a su presencia, sin importarle que no pude alcanzar a verte con vida, que solo me permitio verte dormida y que me tuve que conformar con darte un beso a traves del cristal.
Pienso que no merecia tanta crueldad, pero tambien pienso que fue generoso al poder permitirme decirte hasta otra vez será.



